martes, 10 de septiembre de 2013

El deseo codicioso.

Uno de los pecados mas tremendos en la persona es el deseo codicioso, ya que el desear es la falta de lo que no se tiene o saciar un gusto, y la codicia es el deseo excesivo o apetito desordenado de riquezas, poder, fama, reconocimiento, etc.

El apetito del hombre en todos los sentidos es insaciable, cuando se tiene se vuelve asta avaro y no del dinero solamente ya que esta avaricia es un mal doloroso que no deja ni dormir a la persona y lo entrega a una potestad que es el insomnio y un fruto que es la inseguridad y la prepotencia.

 La sabiduría nos enseña

 Eclesiastés 7:16-17
16. No seas demasiado justo, no seas sabio con exceso; ¿por qué habrás de destruirte?17. No hagas mucho mal, ni seas insensato; ¿por qué habrás de morir antes de tiempo? 

Eclesiastés 7:15
En el día del bien goza del bien; y en el día de la adversidad considera. Elohe hizo tanto lo uno como lo otro, a fin de que el hombre halle después de ÉL.

Toma todo lo bueno de lo que te rodea, desecha lo que no te edifica, pero si tomas a tu conveniencia lo injusto darás cuentas, puesto que muchos dicen: ¡¡es qué esto me edifico!! pero sabiendo tu que no es lo correcto, darás cuentas.

Solo se consciente de lo que haces o ejerces y conoce asta donde llega tu deseo o tu codicia, no sea que tu mismo te destruyas y te hundas en un fango del cual no quisiste salir...

Eclesiastés 5:7
Donde abundan los sueños, también abundan las vanidades y las muchas palabras; mas tu TEME A ELOHE...PORQUE EL PRINCIPIO DE LA SABIDURÍA ES EL TEMOR A YHWH.


Shalom Ubrajot...

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